Si has decidido trabajar como fisioterapeuta, quieres ayudar activamente a las personas para que puedan vivir su vida sin dolores ni molestias. Esto aporta satisfacción y es una de las principales razones para elegir esta profesión.
Actualmente hay una gran necesidad de fisioterapeutas en toda Alemania, y en el futuro habrá una necesidad cada vez mayor. Esto ofrece a los fisioterapeutas que viven y trabajan en el extranjero una gran oportunidad de hacer carrera en un entorno completamente nuevo. Las condiciones de trabajo son buenas. Hay una amplia oferta de cursos para desarrollarse. Además, aunque vengas del extranjero, puedes montar tu propia consulta al cabo de un tiempo.
Para ser fisioterapeuta en Alemania hay que cursar una formación dual de tres años. Dual significa que la parte práctica de la formación tiene lugar en una empresa, como una consulta, un hospital o una clínica de rehabilitación. Esto significa que desde el principio se aprende lo que es importante en la vida laboral real. Se aprende la teoría, es decir, todos los conocimientos previos, integrados en las partes prácticas en una escuela especial.
Si ya trabaja como fisioterapeuta en el extranjero, su cualificación profesional debe estar reconocida en Alemania. Esto se compara con los requisitos que se exigen a los fisioterapeutas alemanes en prácticas. En otras palabras: lo que demuestres en el examen final en Alemania en teoría y práctica, también debes poder hacerlo como extranjero. Además, es necesario acreditar un nivel de alemán B2.
Tras aprobar el llamado examen de conocimientos especializados o realizar un curso de adaptación, trabajarás en centros ambulatorios con equipos reducidos, en hospitales, clínicas de rehabilitación, residencias de ancianos u otras instalaciones.
En Signite te ayudamos a seguir este camino y a continuar con éxito tu carrera profesional como fisioterapeuta en Alemania.
Volver